La poca importancia que políticos y funcionarios prestan al tema de la comunicación gubernamental, se ve reflejada en qué muchos de ellos dejen la responsabilidad en manos de inexpertos, con nula capacitación o pocas nociones para realizarla, por lo que es común ver casos como el “resbalón” del Gobierno del Estado de Jalisco, en cuya cuenta de twitter se publicó a manera de broma, el atropellamiento del personaje infantil mexicano “Chabelo”; o como el del Gobernador de Veracruz Javier Duarte, quien también en twitter, informó la activación del protocolo de atención a la explosión registrada en el complejo petroquímico “Pajaritos”, con una imagen que no corresponde al hecho, sino a una en Libia.
Imágenes proporcionadas por la autora del artículo
Con el creciente uso de las plataformas digitales, empleadas cada vez más para hacer política en internet, son más visibles los errores en la gestión de la comunicación, por lo que bien podríamos enumerar ejemplos de éstos, y no solo de los que ocurren en México, sino en todo el mundo y en los que incurren toda clase de funcionarios públicos, desde alcaldes hasta ministros y presidentes.
La realidad nos dice que el rol del DirCom en las instituciones gubernamentales se ha visto relegada al limitar sus funciones al envío de boletines y fotos, sirviendo a la organización como “un área de apoyo”, cuando éste debe ser un asesor con la capacidad de analizar entornos complejos y con una visión 360º grados de la misma, sin embargo, ha sido recurrente que los políticos contraten a quienes apoyaron en las campañas electorales, sin tomar en cuenta si tienen la formación para desempeñar las funciones y en el peor de los casos, contratan a sus amigos.
Aureola del Sol Castillo Peralta, Consultora en Comunicación de Gobierno. Foto: Archivo Personal
Entender la importancia de contar con profesionales para realizar la labor del DirCom ha sido difícil, pero la práctica nos indica que es mejor invertir en comunicación a estar de “apagafuegos”, por lo que recomiendo cinco pasos para mejorar la comunicación de gobierno.
1.- Aprenda a comunicar. “Todo comunica”
Un líder es visto y juzgado en 360º; comunicar solo a través de boletines y fotos es cosa del pasado, hay que saber qué decir, cómo decirlo y a quién decirlo, “no sólo se comunica con palabras, sino con acciones”.
2.- Invierta en comunicación
Es más rentable invertir en comunicación que tener que estar de “apagafuegos” de las consecuencias que se generan por una mala gestión.
3.- Capacite a su equipo
Desde el primer ministro, su gabinete y el equipo de comunicación deben estar en constante capacitación y actualización, deje de pensar que la buena gestión se da “por sentido común.
4.- Tenga un Plan de Comunicación Interna
De poco o nada nos sirve persuadir a los públicos externos si dentro de la organización no hay plena convicción de sus objetivos; en el momento en que los integrantes de la institución crean en sus valores “se habrán puesto la camiseta”.
5.- Diseñe un Manual de Comunicación
Este documento deberá establecer las reglas de la política de la comunicación de la organización tanto para Redes sociales, comunicación tradicional e interna así como para el manejo de crisis.
El rol del DirCom una asignatura pendiente
Cuando la gestión de la comunicación de gobierno se realiza sin un proyecto y estrategia, la institución podrá seguir su camino, pero sin brújula, con buenos o malos resultados, pero tarde o temprano llegará el caos, usted decide: o entiende la importancia del rol del DirCom e invierte en comunicación o sigue lanzando mensajes sin rumbo.
Por: Aureola del Sol Castillo Peralta, Consultora en Comunicación desde Campeche, México