Las elecciones legislativas del 13 de marzo estuvieron marcadas por el empuje del Pacto Histórico, el retroceso del Centro Democrático, la resistencia de los partidos tradicionales, la pérdida de fuerza de la U y de Cambio Radical, y el leve avance de la alianza Verde- Centro Esperanza.
Hay un nuevo Congreso a la espera de posesionarse, no renovado del todo y esa nueva configuración incidirá sobre el funcionamiento del Legislativo y su relación con el gobierno que comenzará en agosto. El Pacto Histórico logró su propósito de ser la lista más votada y mejor representada en el Senado. El uribismo salió duramente castigado de estas elecciones, en parte por la ausencia de un gran elector como lo es Álvaro Uribe Vélez y por un voto de castigo frente al gobierno de Iván Duque que no logró conectarse con la opinión y fue incapaz de lidiar con la movilización social.
Contrario a lo que muchos midieron y especularon, los partidos tradicionales Conservador y Liberal resistieron el proceso electoral e inclusive lograron aumentar sus cuotas en el Congreso, especialmente en la Cámara de Representantes. Finalmente, conviene mencionar el interesante caso de la Alianza Verde-Centro Esperanza. La alianza de centro tuvo que competir en condiciones difíciles con la ausencia de Antanas Mockus y con la falta de arrastre de una consulta que fue la menos votada. Sin embargo, el centro logró mantener su presencia en el Congreso y además logró crecer un poco por el arraigo electoral en departamentos como Boyacá, Caldas y Santander.
Por nuestra parte, como firma consultora en estrategia política y electoral, acompañamos 5 procesos electorales en diferentes regiones del país, con resultados satisfactorios para nuestros candidatos y para nuestra firma, que suma 4 victorias contundentes a nuestros casos de éxito, y más importante que eso, la revelación de liderazgos necesarios para el momento histórico que atraviesa nuestro país. Con una tasa de éxito superior al 90%, #SabemosGanar
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