En medio de una gran tensión por denuncias de supuesta campaña oscura hechas por el actual jefe del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, quien funge como candidato presidencial y lideró la primera vuelta previa al balotaje por el primer cargo en el Palacio Rosado, transcurren los primeros días luego de el primer round de votación para conocer quién reemplazará a la señora Cristina Fernández de K. en el gobierno argentino.
Con casi un empate técnico el pasado domingo 25 de octubre, la elección del próximo presidente de Argentina requerirá una segunda vuelta de votación, la cual está programada para el 22 de noviembre.
Daniel Scioli, candidato del oficialismo, confiaba en el respaldo que podría generarle el apoyo de la hoy presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, y en las cifras que mostraban las encuestas, para ganar las elecciones en primera vuelta. Sin embargo, no alcanzó ni el 40% de los votos y el margen que lo separó de Mauricio Macri, candidato opositor y con quien irá a segunda vuelta, fue apenas del 2,5%.
Ahora Macri tiene todas las de ganar y Scioli, junto con todo el peronismo oficial, lo sabe. Para ganar Scioli debe hacerse al 21,1% de los votos que obtuvo Sergio Massa, candidato peronista opositor al mandato Kirchner. Macri la tiene más fácil, ya que tiene un 65% de votantes que no le apostaron a Scioli para convencer de que lo apoyen en la próxima vuelta. Con que logre capturar una porción de este, tiene el triunfo asegurado.
Pero, técnicamente, ¿qué se necesita para ganar las elecciones presidenciales en Argentina? Según la Constitución de 1994, en este país lo que rige es el sistema de balotaje, el cual determina que, para ganar en primera vuelta, un candidato debe superar el 45% de los votos o, si su votación equivale a un porcentaje entre el 40% y el 44% del total de votos, la diferencia con quien ocupe el segundo puesto debe ser mínimo del 10%.
Así las cosas, Scioli y Macri tendrán que pelearse voto por voto si quieren obtener la mayoría de votos afirmativos válidamente emitidos y salir ganadores el próximo 22 de noviembre, fecha en que por primera vez en la historia de Argentina habrá un balotaje en la elección presidencial.
Miguel Jaramillo Luján y Sara Pérez Restrepo