Blanca Islas – Consultora Política
Hablar de la participación ciudadana en la política hoy me parece necesario, ya que es justamente desde la sociedad civil organizada en donde se han fraguado los más significativos progresos en la organización social.
Siempre he pensado que si la sociedad está organizada los gobiernos pueden trabajar, no importa el nivel de que se trate o el tamaño del proyecto. Cuando los ciudadanos hacemos nuestros los problemas comunes, y en consecuencia, sucede la propuesta.
Es importante la organización desde una junta de vecinos, hasta asociaciones mundiales que abanderan causas sociales que nos representan a todos. Hoy los colectivos son lo más común, personas sumadas con un objetivo, luchando por derechos, convencidos de la Justicia y del deber ser.
En lo personal, he tenido la oportunidad de representar causas, convencida siempre de su autenticidad. Recordando algunas, como adolescente el ser escuchada, en donde mi joven voz tuviese un espacio, en una época en donde la educación era que los hijos jamás podríamos contradecir a nuestros padres.
Hoy es lo más natural entablar una relación y profunda conversación con mi hija de 20 años que tiene un amplio criterio y que justamente fue la dinámica de la comunicación la que cambió eso en mi familia, en la interacción con mis hijos y debo reconocer que tuve yo que desaprender los viejos patrones.
He luchado por los derechos políticos de las mujeres por mucho tiempo, de los comerciantes establecidos como líder empresarial, he trabajado arduamente por los derechos de las personas con discapacidad y hacer mías sus causas. Y otras tantas razones que me formaron y me forjaron al ser humano que hoy soy, pero que todas le dan sentido a mi vida actualmente.
Siempre me he considerado una mujer de instituciones y de ideales. Eso tiene que ver con mi mismidad y lo que me tocó vivir desde niña, que sin lugar a duda impactó mi vida.
Creo que todas las personas tenemos razones, esas que vienen del corazón y que lo que motiva va más allá de los intereses personales o materiales.
Por eso hoy que veo un México de contrastes, de una sociedad polarizada en la que todos estamos buscando un espacio, un foro de participación, ser escuchados y saber que somos parte de la solución en la construcción de una sociedad más justa.
Todo requiere voluntad y en la democracia hemos aprendido que a veces se gana y a veces se pierde. Conjuntar ideas, caracteres a veces antagónicos, todos por supuesto relevantes pero que en el camino interviene lo que yo llamo la “naturaleza humana” y que muchas veces desvirtúa el sentido.
Pero es ahí donde surgen los verdaderos liderazgos, esos que con visión logran comunicar, convencer, persuadir a la acción. Esos liderazgos que conectan con el más alto sentido de que su radio de acción sea mayor.
Muchas veces me pregunto ¿Qué motiva a una persona a participar en lo social? Ineludiblemente llego a la conclusión que tiene que ver consigo mismo, con su naturaleza, con su historia personal y con lo que realmente lo mueve.
Y yo creo que eso está bien porque son sus razones, mismas que defenderá a capa y espada. Que en medio de la jungla podrá desarrollar estrategias que beneficien a todos, porque creo que la esencia de la estrategia se basa en desarrollar las capacidades organizacionales para adquirir, crear, acumular, compartir y aprovechar conocimientos, experiencia que facilite el objetivo común.
Por eso soy una apasionada de la comunicación, pero esa comunicación que genera interacción entre los individuos. Que podamos ejercer siempre la libertad de expresión con valores, que nos respetemos los unos a los otros como el principal acuerdo, que manifestarnos no termine con el derecho del otro y mucho menos denote su valor.
Hoy veo a nuestro país con graves problemas sociales, con la injusticia, la pobreza y precariedad con la que viven millones de oaxaqueños, y me duele. Me duele la realidad de lo que espera los niños que hoy juegan con la inocencia de no saber y menos entender lo que les depara si hoy tú o yo no participamos para construirles mejores oportunidades.
Estimado lector, el proceso presidencial para el 2024 ya comenzó hoy tenemos un abanico de oportunidades y medios para evaluar cómo participar. Estoy convencida que somos justamente los ciudadanos quienes tenemos que decidir desde la intimidad si queremos participar y una vez tomada la decisión, accionar. La auto gestión de la oportunidad es la clave, siempre podemos ayudar y abonar a edificar un mejor y feliz lugar donde vivir.