“No bote su voto” es una expresión bastante común en términos electorales y en el marco de algunas estrategias de Marketing Político y Gobierno, cuando algunas campañas o desde algunos intereses se informa a los ciudadanos que sólo existen 2 o a lo sumo 3 candidatos con opción en un abanico que supera esa cifra.
Fruto de los finales reñidos con agotamiento de los márgenes de indecisión, estabilización en las cifras de abstencionismo y voto en blanco, muchos estrategas apuntan a derribar a los candidatos que parten votación por nichos y cuya probabilidad de ser los ganadores es baja. Con esto, algunos sectores de voto indeciso e incluso de voto frágil, opta por seguir el efecto bandvagon e irse a una opción ganadora.
Miguel Jaramillo Luján
Consultor en Marketing Político y Gobierno